pues he venido a hablar de mi libro
He publicado una serie de relatos cortos con narrativa surrealista que investigan los detectives Gilo Y Ben. Es humor absurdo sobre una serie de disparatadas ideas originales muy al estilo Woody Allen, o Groucho Marx. Si no os gusta ese humor, está claro que este libro os parecerá una patraña (que también). Algunas historias llevan muchos años publicadas en mi blog.
Como somo ingeniero, algunas historias van sobre ciencia, y como amante de la retroinformática alguna de las investigaciones también trata este tema. de hecho, os copia un cacho de una, para que veáis el estilo.
Lo tengo solo de venta en amazon, a precio mínimo para versión papel, y gratis para los kindle. Agradecería también una buena reseña por vuestra parte
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PORTADA
CAPÍTULO : 29 EL ENIGMA DEL GLITCH VIAJERO
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Escena 1: "La agencia en 8 bits"
(En una oficina pequeña y desordenada, un ventilador oxidado gira tan lentamente que parece estar observando con detenimiento cada rincón. Gilo, un detective con bigote meticulosamente desaliñado y traje arrugado, está sentado con los pies sobre el escritorio leyendo un periódico del año pasado. Ben, su ayudante, intenta arreglar una máquina de escribir usando un tenedor y una lata de sardinas. En el rincón un Amstrad de fósforo verde, y un Spectrum 48kb hablan de sus cosas y acaban dándose la mano. Un MSX los mira con asombro. Hay carteles retro de pantallas finales épicas del Black Tiger, y récord imposible del Tetris en 3D).
GILO: (Sin levantar la vista del periódico) Ben, ¿sabías que según este artículo el futuro de la humanidad está en las computadoras? Dice que pronto todos tendremos una en casa.
BEN: (Confundido, mirando la máquina de escribir) Pero jefe, ¿para qué querría alguien una máquina de escribir que no tiene la letra "ñ"?
GILO: (Bajando el periódico) No hablo de esa antigüedad, hablo de computadoras, ordenadores, cerebros electrónicos.
BEN: Ah, ya entiendo. Como mi tía Enriqueta, que después de tres Martinis puede calcular cuántos días faltan para que se le acabe la pensión.
GILO: (Suspirando) La única conexión entre tu tía Enriqueta y un ordenador es que ambos funcionan a base de electricidad, aunque en el caso de tu tía sea producto de sus calcetines de nylon frotando contra la alfombra.
BEN: Jefe, no sea injusto. Mi tía programa muy bien... programaba todas sus citas con el médico sin ayuda de nadie.
MARGA: (Entrando a la oficina con una taza de café que parece contener cemento líquido) Señor Gilo, hay un cliente esperando afuera. Dice que es urgente.
GILO: (Quitando los pies del escritorio) Marga, en nuestro negocio todo es urgente, excepto pagar el alquiler. Haz pasar a nuestro desesperado contribuyente pero antes háblale de mis honorarios.
BEN: (Dejando caer el tenedor dentro de la máquina de escribir) ¡Un cliente! ¿Tengo tiempo de ponerme la corbata?
GILO: Ben, la última vez que te pusiste una corbata, tres palomas intentaron anidar en ella. Mejor quédate como estás.
MARGA: (Asintiendo) Lo haré pasar entonces.
(Marga sale y regresa acompañada de un hombre de mediana edad con gafas gruesas y una camiseta que dice "8 Bits Power").
MARGA: El señor Ramiro Píxel, propietario de "Retromanía Arcade".
GILO: (Poniéndose de pie y extendiendo la mano) Bienvenido a "Gilo & Ben, detectives de lo inexorable". Donde lo inexorable es nuestra especialidad y lo explicable nuestro pasatiempo. Siéntese, por favor, a menos que prefiera bailar mientras conversamos.
RAMIRO: (Nervioso) Gracias, prefiero sentarme. Tengo un problema gravísimo.
BEN: (Acercándose rápidamente) ¿Le han robado? ¿Le persiguen? ¿Ha perdido su colección de sellos prefilatelistas de la dinastía Ming?
GILO: Ben, los sellos prefilatelistas son anteriores a los sellos, y la dinastía Ming es china, no filatélica.
BEN: Lo que sea, jefe. Yo colecciono tapones de botella, así que entiendo el drama.
RAMIRO: Mi problema es con mis máquinas arcade. Todas se han vuelto locas.
GILO: (Interesado) ¿Locas en el sentido figurado o en el sentido de que han formado un sindicato y exigen descansos pagados?
RAMIRO: (Sacando un pañuelo para secarse el sudor) Los personajes de los juegos están saltando de una máquina a otra. ¡Es un caos! Pac-Man está en el juego de Mario Bros comiéndose los hongos, Donkey Kong lanza barriles a las naves de Space Invaders, y el fontanero de Bomb Jack está desactivando “tetrominós” en el Tetris.
Escena 2: "La sala de máquinas delirantes"
(Una amplia sala de exposiciones llena de máquinas arcade vintage que emiten luces y sonidos en una cacofonía digital. Algunas máquinas parpadean de forma errática mientras sus pantallas muestran personajes completamente fuera de contexto. Gilo examina una máquina con lupa mientras Ben presiona todos los botones de otra).
GILO: (Observando detenidamente) Fascinante. Es como si alguien hubiera abierto portales entre mundos digitales. ¿Ves ese Tetris, Ben? Las piezas están siendo devoradas por los fantasmas de Pac-Man.
BEN: (Jugando frenéticamente) ¡Jefe! ¡Este juego es imposible! Estoy pilotando una nave espacial de Galaga, pero tengo que saltar sobre tortugas y recoger monedas. ¡Ya he perdido siete vidas en el primer nivel!
RAMIRO: (Desesperado) ¿Ven lo que les digo? Todos los juegos están mezclados. La gente viene, intenta jugar y se va frustrada.
GILO: (Pasando a otra máquina) ¿Desde cuándo comenzó esta... digamos, integración interdimensional de sus pixelados inquilinos?
RAMIRO: Hace exactamente tres días. Llegué por la mañana y todas las máquinas estaban así. Revisé las cámaras de seguridad y no entró nadie durante la noche.
BEN: (Dejando los controles) ¿Y ha intentado desenchufarlas y volverlas a enchufar? Mi tío Segismundo resuelve así todos sus problemas eléctricos. Claro que ahora tiene el pelo permanentemente de punta, pero es un efecto secundario menor. Desenchufar es el “reset” universal, jefe. La panacea para todo, desde un módem rebelde hasta mi cerebro los lunes por la mañana.
GILO: Ben, estas máquinas no son como tu radio despertador. Son complejos sistemas electrónicos que... (se interrumpe al ver que Ramiro asiente)
RAMIRO: Fue lo primero que intenté. Las apagué todas durante una noche entera. Cuando las encendí de nuevo, seguían igual o peor.
GILO: (Acariciándose el bigote) Esto huele a manipulación de código. Alguien ha hackeado sus máquinas.
BEN: (Soñando que es Kevin Mitnick) ¿Saben por qué los programadores confunden Halloween con Navidad? Porque OCT 31 = DEC 25.
GILO: (Mirando a Ben) Gracias por ese aporte cultural, Ben. Volviendo al caso...
(Un joven con una camiseta de "I ♥ 8-bits" se acerca a ellos).
FRIKI: (Ajustándose las gafas) Perdonen, no he podido evitar escucharlos. Soy Lucas, experto en retroinformática. Lo que están viendo es técnicamente imposible sin modificar el código fuente de estos juegos.
GILO: (Girándose hacia él) Ah, un experto. Dígame, señor... Lucas, ¿tiene alguna teoría sobre cómo pudo ocurrir esto?
LUCAS: (Emocionado) Solo hay una explicación: alguien creó un gusano interdimensional que permite a los Sprites y rutinas de un juego infiltrarse en otro. Estamos hablando de programación a nivel de ensamblador, quizás incluso manipulación directa de la memoria ROM. Esto no es solo un hackeo, es un 'pixel-bending' a nivel cuántico. La distorsión espacio-temporal de los sprites es manual y deliberada.
BEN: (Confundido) ¿Un gusano? Yo tenía uno de mascota cuando era niño. Se llamaba Enrique. O al menos eso creía hasta que descubrí que era un trozo de espagueti que se me había caído debajo de la cama.
Escena 3: "La leyenda del máster retirado"
(Gilo, Ben, Ramiro y Lucas están sentados alrededor de una mesa en la cafetería de la sala de exposiciones. Sobre la mesa hay tazas de café y una placa base antigua que Lucas está examinando).
LUCAS: (Con voz baja y reverencial) He analizado el código residual en esta máquina. Es obra de Bit-Zero, estoy seguro.
GILO: ¿Bit-Zero? Suena como el nombre de un villano de una película de espías de bajo presupuesto.
LUCAS: Es una leyenda en el mundo del hacking. Dicen que fue parte del equipo original de Dinámico Software, pero lo echaron porque sus ideas eran demasiado revolucionarias.
RAMIRO: (Nervioso) La inauguración es en tres días. ¿Cómo podemos arreglar esto?
LUCAS: Hay una forma... pero es casi imposible.
BEN: (Entusiasmado) ¡Dígala! Lo imposible es nuestra especialidad. Lo dificilísimo lo hacemos enseguida, lo imposible tarda un poco más.
LUCAS: Hay que completar todos los juegos en su estado actual. Al llegar a la pantalla final, debe aparecer un mensaje o código del hacker.
